Los puentes rectificadores son semiconductores discretos que tienen un único dispositivo semiconductor, es decir, un diodo y son lo opuesto a un semiconductor de circuito integrado que tiene varios dispositivos en un único semiconductor. El circuito de puente de diodo se inventó en 1895 y Leo Graetz diseñó un circuito similar, por lo que también se conoce como circuito de Graetz o puente de Graetz.
Un puente rectificador se compone de 4 o más diodos dispuestos en una configuración específica: el puente homónimo. Este puente de diodo es capaz de convertir una entrada de corriente alterna (ac) en corriente continua (dc), una función básica para la mayoría de los dispositivos electrónicos. También proporciona la misma polaridad de salida para cualquier polaridad de entrada. Estos dispositivos funcionan con una entrada ac de dos cables, tienen dos caídas de diodo en su diseño y ofrecen rectificación de onda completa.
Los puentes rectificadores se utilizan habitualmente en fuentes de alimentación que proporcionan la tensión dc necesaria para los dispositivos o componentes electrónicos y se pueden encontrar en diversas aplicaciones como electrodomésticos. Además, estos dispositivos son populares entre los aficionados a la electrónica que disfrutan con la construcción de circuitos.Los puentes rectificadores se clasifican generalmente en monofásicos y trifásicos.Se suministran en diversos encapsulados y tipos de montaje incluidos montaje roscado, montaje superficial y orificio pasante.
Puesto que los puentes rectificadores son dispositivos discretos, algunos de ellos deben adquirirse junto con otros dispositivos para lograr la funcionalidad deseada para la que se han diseñado. Para algunas necesidades de ingeniería, la capacidad de adquirir semiconductores discretos convierte la creación de prototipos y la producción en asequible.